La octava edición de la Semana de la Tortilla de Navarra ya tiene ganadores. El Monasterio de la calle Espoz y Mina de Pamplona ha ganado este año el premio a la tortilla tradicional (en la foto Celia de Pedro, desde abril responsable de un bar que ya recibió premio en la edición anterior), y el tortilla 'con', La Catedral de Tudela, (en la foto Marcos Milagro) que ha ganado con su tortilla con piparras, con la que ya ganó en 2023.
Una cita gastronómica organizada por la Asociación de Hostelería y Turismo de Navarra (AEHN) con la participación de 23 establecimientos de localidades como Pamplona, Ayegui, Berriozar, Burlada, Corella, Noáin y Tudela. El Premio Huevos Larraz ha ido parar al Camping Iratxe de Ayegui, con una tortilla "que sabe a verano y montaña".
Durante los diez días del evento, cada establecimiento participante ha podido ofrecer dos versiones de tortilla de patatas: tortilla de patata tradicional, con ingredientes clásicos (patata, huevo, sal, aceite de oliva y opcional cebolla); y Tortilla de patata con..., con base en tortilla de patata y versión creativa con ingredientes libres "que aporten personalidad, originalidad y nuevos sabores".
Bar Monasterio
El pasado mes de abril Celia de Pedro se mudó pocos metros. Cambió Casa Paco por el bar Monasterio, del que es propietaria y cocinera. “Como quien dice todavía estamos despegando, y esto nos ayudará a darle un pequeño impulso más al negocio, que hace falta”, ha explicado este martes muy satisfecha. Debuta con premio.
Su secreto para una buena tortilla es “utilizar productos de calidad, eso siempre. Productos frescos, como los huevos de Larraz, y la patata siempre recién cortada y con aceite de oliva virgen extra. Hay que darle un toque de crunchy, que esté bien fritica”, ha asegurado. Su tortilla no admite debate y lleva siempre cebolla: “En mi caso, bastante cebolla. Me gusta caramerizarla un poquito, está dulzona”. Y en cuanto al punto, la prefiere no muy cuajada. “Me gusta un poco líquida”.
Esta cocinera admite que lo de hacer tortillas de par de mañana “es lo que más me gusta hacer”. Todos los días saca entre 6 y 10 a la barra, con diferentes propuestas. “Me levanto, voy al bar y lo primero que hago es poner a freír la patata para sacar las tortillas. Luego ya van el resto de pintxos. Porque la gente va a desayunar y pide el pintxo de tortilla”.
En su Monasterio “la que más triunfa de las que tenemos es una de carrillera un poco picante, esa triunfa muchísimo. También vendemos mucho una de trufa, hacemos de papada ibérica, de ajoarriero... de todo y voy variando. La de trufa, de carrilleras y la tradicional nunca faltan, y luego voy variando para que la gente no se encuentre siempre los mismos pintxos”, ha reconocido.
Por último, De Pedro ha agradecido “a los patrocinadores por hacer posibles estas semanas gastronómicas, que dan mucho juego para que la gente nos conozca y no vaya siempre a los bares de debajo de casa, para que se muevan. En Pamplona somos muchos de pintxo pote y estas semanas siempre se nota que hay movimiento”.
Bar La Catedral
Marcos Milagro, gerente y propietario del bar La Catedral de Tudela, se estrenó con victoria en la 6ª edición de la Semana de la Tortilla de Navarra. El año pasado también compitió con una tortilla de anchoa en salazón, “pero no resultó. Este año hemos repetido con piparra y ha vuelto a funcionar. Para qué vamos a cambiar si la cosa funciona”, ha dicho este martes. La suya “no tiene ningún secreto. Usamos producto fresco; huevo fresco, patata fresca, cebolla fresca, aceite, un producto súper importante para nosotros, de una almazara, clientes y amigos, aceites Sandúa, algo espectacular. Y piparra de temporada. La sofreímos con el aceite y con la patata, dejamos macerar durante cinco minutos y en la sartén vuelta y vuelta. No tiene más misterio”. Y ha reconocido que la tortilla es “algo muy nuestro, la enseña de un bar, el termómetro”. Si está buena, el bar es bueno. Tan simple como cierto.
La victoria “es muy importaste para el pequeño negocio, para la pequeña hostelería como nosotros, en un pueblo pequeño como Tudela. Ganar dos de las tres ediciones en las que nos hemos presentado es muy importante; no a nivel económico, pero sí el premio profesional, el premio hostelero y el premio publicitario, que nos hace mucho hoy en día gracias a dios”.
Además, la piparra es un ingrediente clave en su bar. “Nuestro pintxo estrella es una gilda, en ese caso con piparra encurtida. En la tortilla se utiliza piparra fresca, y solamente la hacemos cuando hay temporada”. Por supuesto, la tortilla ganadora se queda en la barra. “El año pasado preparamos unas 50 raciones diarias, este año será igual o intentaremos incrementarlas. Al final somos un gastrobar, tenemos una cocina pequeña, y hay que limitar las raciones diarias”.