La guitarra de Tomatito y el cante de Antonio "El Turry" han puesto la nota flamenca al sábado pamplonés, con dos recitales consecutivos que han reunido a centenares de personas en torno a la Plaza Consistorial y al hotel La Perla.
A las 12:00 horas, con la plaza abarrotada pero bajo un clima amable, sin excesivo calor, Tomatito se ha asomado al balcón del Ayuntamiento para regalar poco menos de media hora de música. El público lo ha recibido con una ovación que se ha repetido al finalizar su actuación, muestra del respeto y la admiración hacia una figura imprescindible de la guitarra flamenca contemporánea.
Sobrino del Niño Miguel y discípulo de gigantes como Paco de Lucía o Sabicas, Tomatito se ha dado a conocer como acompañante de Camarón en discos ya históricos como 'La leyenda del tiempo', en los que su toque juvenil abrió caminos nuevos al flamenco. Con los años, su trayectoria como concertista lo ha situado en la cúspide del panorama musical, desde sus celebrados álbumes 'Barrio Negro' y 'Guitarra gitana' hasta su personal interpretación del 'Concierto de Aranjuez'.
Su versatilidad le ha llevado también a cruzar fronteras junto al pianista Michel Camilo en los proyectos 'Spain', 'Spain again' y 'Spain forever', donde ha tejido puentes entre la música clásica, el jazz y el flamenco. Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes en 2016, su presencia en Pamplona ha vuelto a confirmar que, cada vez que toca, la guitarra flamenca se expande hacia territorios de hondura y modernidad.
Antonio "El Turry"
Minutos después, a las 12:45, la cita se ha trasladado al balcón del hotel La Perla, donde se ha agolpado de nuevo numeroso público para escuchar al cantaor granadino Antonio "El Turry". Natural de Almuñécar e hijo del guitarrista Ricardo de la Juana y de la bailaora Rosa la Canastera, se ha iniciado en la profesión con apenas diez años en la compañía familiar.
Con la mayoría de edad, se ha instalado en Granada, donde se ha forjado en los tablaos y cuevas que mantienen vivo el duende de la ciudad. Desde entonces, su carrera ha crecido sin descanso, y le ha permitido compartir escenario con nombres de referencia como Eva Yerbabuena, Niño Josele, Marina Heredia, Juan de Juan o Antonio "El Farru".
En Pamplona ha estado acompañado por el joven guitarrista jerezano Marcos De Silva, considerado por la crítica como "el nuevo chico maravilla del toque flamenco". Juntos han ofrecido un recital cargado de fuerza y emoción, que ha arrancado calurosos aplausos del público que abarrotaba el lugar frente al emblemático hotel.
Dos balcones, dos escenarios improvisados y dos figuras que, con la guitarra y el cante, han acercado al corazón de la ciudad la riqueza de un arte que sigue creciendo sin perder su raíz.