La Audiencia Provincial de Navarra ha condenado de conformidad a Leydis Ávila Pérez, de 31 años, que el 10 de mayo de 2023 mató de una cuchillada a su expareja, Raúl Sierra Pérez, de 45, en el domicilio de él en el barrio de la Rochapea de Pamplona, a una pena de 10 años y medio de prisión por homicidio. La acusada ha reconocido los hechos antes de que se iniciara el juicio y ha aceptado una pena en la que se le ha aplicado la atenuante de reparación del daño, ya que con anterioridad había depositado 10.000 euros para el abono de la responsabilidad civil.
En su turno de palabra, la mujer ha pedido perdón a la familia y a la hija y ha reconocido que la víctima "era un buen hombre y un buen padre".
También se ha decretado la prohibición de comunicarse y acercarse a su hija durante un periodo de 15 años y, tras el cumplimiento de la pena de prisión, pasará un periodo de cinco años de libertad vigilada, de modo que la aceptación de condena no ha hecho necesario que se constituyera este lunes el jurado. Además, deberá indemnizar a la familia de la víctima, incluida su hija, con un total de 55.000 euros. Así las cosas, el juicio se ha dado por concluido.
El fiscal solicitaba 13 años de prisión para la procesada, de nacionalidad cubana, como autora de un delito de homicidio. La acusación particular pedía 15 años por el delito de homicidio y 5 años más por un delito de amenazas.
Por su parte, la defensa reclamaba la absolución al considerar que concurre la eximente completa -circunstancia que libera de responsabilidad penal- de anomalía o alteración psíquica.
El 10 de mayo del pasado año, la acusada envió un mensaje por WhatsApp a su ex, pese a que tenía una orden de alejamiento e incomunicación que le impedía mantener ningún contacto con él. Le dijo que quería ir a su domicilio, situado en el barrio de la Rochapea, para discutir cuestiones relacionadas con la hija en común.
Cuchillada en el corazón
La acusada acudió a las 13.47 horas y salió del portal sin poder entrar en el domicilio, ya que el hombre no se encontraba en el interior. Regresó de nuevo a las 14.11, y subió al piso. Mantuvo una discusión verbal con su ex, durante la cual cogió un cuchillo y se lo clavó, siguiendo una trayectoria dentro del cuerpo descendente y de fuera adentro, la cual le produjo una trayectoria de 15 centímetros. Al sentir la puñalada, la víctima abandonó el domicilio. Bajó por las escaleras y cayó desplomado poco después en el rellano del portal.
