Seguir o no seguir. Domingo de dilema, superlunes de conclusión. Este 29 de abril puede pasar a la historia. Quedan horas para saber si la carta de marras de Pedro Sánchez, que ha generado un seísmo político e informativo, se convierte en maremoto. El escenario de la dimisión ha tomado relieve, si bien no es descartable su continuidad apoyada sobre un relato que, eso sí, debería resultar muy convincente. De momento, se multiplican las hipótesis y los interrogantes. Siete observadores políticos, Eduardo Bayón, Víctor García de la Vega, Imma Aguilar, Miguel Pasquau, Elisa Beni, Iker Merodio y Fernando Berlín, analizan este momento realmente singular, y reflexionan sobre el ánimo que puede brotar o haberse instalado en Pedro Sánchez y qué puede suceder este lunes.
HORAS CLAVES
Fernando Berlín, conductor de La Cafetera y director de radiocable.com, cree en el “componente personal” en este asunto. “La prueba de que no ha sido un movimiento táctico ni estratégico es que no hubo reuniones con el equipo”. Piensa que “estas horas son determinantes; el Partido Socialista confía en que la movilización en Ferraz anime a Sánchez a no dimitir”. Berlín intuye que ni siquiera el propio protagonista lo tiene muy claro. Y observa al PSOE “noqueado, porque en el caso de que se marche Sánchez el partido se quedaría patas arriba”. El locutor recuerda una dinámica de “envilecimiento salvaje” en los últimos meses, “que no solo le afecta a él y a su mujer, sino también a sus hijos, a sus suegros, y a su entorno”.
“En el caso de que se marche Sánchez el PSOE se quedaría patas arriba”
Berlín cree que esto “probablemente solo se entiende en clave humana”. Constata que “todos los presidentes del Gobierno han sufrido situaciones muy difíciles”, pero cree que las redes sociales marcan un cambio porque llegan al conjunto del núcleo familiar. Asimismo, la “crispación” y “polarización” asoman en cualquier acto, “cada vez que los críos van al colegio, a un evento o a lo que sea”.
Este periodista observa detrás “una estrategia política” del PP, y piensa que si Sánchez se queda la presión puede redoblarse sobre Begoña Gómez. Por ello cree que tiene “muy difícil permanecer si de verdad esto les ha tocado en lo personal”, porque el “periplo” de Begoña Gómez “está empezando”. Por consiguiente, no cree que Sánchez se quiera exponer a esa tensión “cuando ha confesado cuál es su debilidad”.
¿QUÉ EMOCIÓN PRENDERÁ?
Imma Aguilar, asesora de comunicación política, destaca la “tendencia a la imprevisibilidad” de Pedro Sánchez. La redacción “un poquito regulera” de la carta publicada le lleva a pensar en la autoría de Sánchez y en que “sí se siente afectado”. Descarta que haya sido un movimiento táctico, por el “riesgo tan alto” que conlleva. Y se pregunta si el estado de Sánchez es de enfado o de abatimiento. Una diferencia emocional “clave”, porque “si está enfadado actuará de manera muy determinante”. En cambio, “la tristeza en política genera inmovilidad”.
“Esto podría ser la gota que colma el vaso o algo que él nunca había experimentado, una crisis de su mundo privado”
Aguilar constata que la carta, lo pretendiera o no Sánchez, es “un clarísimo ejercicio de movilización” en un periodo “interelectoral”, y un “aviso a navegantes”, también para sus socios. Lo que le ha sucedido podría ser “la gota que colma el vaso o algo que él nunca había experimentado, una crisis de su propio mundo interno y privado”. Aguilar no se lo imagina tirando la toalla, pero tampoco prevé una reincorporación sin más. Dice que Sánchez está “muy preocupado de pasar a la historia, que “le importa mucho dejar un legado fuerte y potente”, y que por consiguiente, “eso va a pesar en su decisión”.
CORRESPONSABLES
A juicio de Iker Merodio, periodista del Grupo Noticias, esto “forma parte de algún plan, viendo la trayectoria de Pedro Sánchez” y añade que a él la carta no le ha “conmovido”. Y considera que la “montaña de irresponsabilidad de partidos y medios de comunicación, el PSOE tiene mucha parte de culpa, dando “cierto peso” a Vox para “condicionar al PP”. “El problema de la extrema derecha ha sido alimentado, o por lo menos nadie le ha quitado la comida, y por eso ha engordado el monstruo y estamos donde estamos”, señala.
“Si estamos ante una operación para ubicarse en Europa ha errado y puede haberse pasado de frenada”
Merodio plantea si estamos ante una “operación” de Sánchez “para ubicarse en un puesto en Europa con algo más de legitimidad”. Si es así, cree que “ha errado y puede haberse pasado de frenada”, porque, observa, “por lo que parece en la prensa internacional esto no ha sido tan bien entendido como a él le hubiera gustado, y ha salido más a la palestra el posible vínculo de su mujer con una posible corrupción que eso venga de un sindicato de extrema derecha que prácticamente nunca ha acertado en sus denuncias”. En todo caso, considera que el movimiento de Sánchez condicionará la campaña a las Europeas, bien porque salga de una cuestión de confianza, por el movimiento social de este fin de semana en torno al socialismo”, o porque se marche.
“ALTA PROBABILIDAD DE DIMISIÓN”
Víctor García de la Vega es analista político y también asistente del PSN en el Parlamento. Dice que el texto de la carta muestra que no pasó por un gabinete de comunicación, y que su publicación apunta “al menos a una alta probabilidad de que no continúe en el cargo”, porque “él se ha dibujado una imagen de resistente, pero no es lo mismo que empiecen a tocar a su mujer, su suegro, su hermano, a gente que él no ha metido en la política”.
“Pedro Sánchez ha asumido que van a ir a por su mujer con cualquier cosa”
García de la Vega piensa que la denuncia sobre Begoña Gómez “no tiene recorrido”, pero que Pedro Sánchez ha “asumido que van a ir a por su mujer con cualquier cosa”. A su juicio el “mayor riesgo que implicaría la dimisión” sería el de “abrir la puerta a la funcionalidad” de una estrategia de acoso y derribo.
“Creo mucho más posible que continúe, pero todo el mundo está en la incertidumbre ”
TIENE "INCENTIVOS"
En cambio, Eduardo Bayón, consultor en comunicación política, se inclina a pensar “con mucha prudencia” que la dimisión no se va a producir, que la carta ha conseguido un “efecto notorio” y que el anuncio de este lunes vendrá acompañado de “algún tipo de decisión” complementaria, tal vez la cuestión de confianza. Bayón ve “muy factible” un horizonte europeo en la carrera de Sánchez, por su perfil y trayectoria, pero “a medio plazo”. Si bien entiende que una dimisión tendría “incentivos” para la imagen pública e histórica del presidente del Gobierno español.
MÁS PREGUNTAS QUE RESPUESTAS
La periodista Elisa Beni estuvo este jueves en Pamplona en la Escuela de Democracia de la UPNA para dar una charla sobre los riesgos del sistema democrático, que se solapó con la noticia que de víspera dio Pedro Sánchez. Beni cree que el presidente del Gobierno “ha establecido un marco mental con su carta” de carácter “emocional”, pero “no hay por qué asumir” que la verdad esté en dicho marco. “Yo por principio como periodista no me creo a pies juntillas nada de lo que me diga nadie y menos un político sea del signo que sea”.
“Sánchez ha establecido un marco mental, pero no hay por qué asumir que sea verdad”
Esta analista observa “mucha floritura” en el texto, que no le cuadra “ni con la cantidad de problemas concretos” en este momento, ni con el elemento desencadenante. Asimismo se pregunta por qué si las diligencias no tienen solidez, han producido esta reacción. “¿El irse las arreglaría?” En definitiva, considera que desde un punto de vista “racional” hay “más preguntas que respuestas” en toda esta cuestión.
PUEDE SEGUIR "CON REFUERZO"
Miguel Pasquau, magistrado, profesor y colaborador en ctxt y en eldiario.es, subraya que “en sí la denuncia (contra Begoña Gómez) no añade nada que no se hubiera dicho antes”. Pero haberlo llevado al juzgado comporta que “la mujer del presidente en principio está señalada en un procedimiento penal, todavía no sabemos con qué alcance ni estatuto; no se le ha llamado a declarar como investigada, aunque se ha propuesto que se haga por parte de la denunciante”.
Según Pasquau, “el hecho en sí de haber unas diligencias penales abiertas sí es un dato”. Además, incide, Begoña Gómez está “investigada en una causa que ha sido declarada secreta, lo que introduce o añade un cierto enigma, porque en función del contenido de la denuncia es difícil de entender que se haya declarado así”. Esto “hace que cualquiera pueda pensar cualquier cosa”.
Si bien considera como “escenario probable” que el juez de instrucción “oiga a los titulares de los periódicos y archive la causa”, cree que ese carácter secreto “tiene que ser por algo distinto a lo que sabemos, porque lo que aparece en la denuncia no lo justifica”. Pasquau entiende que dicho secreto, también para las partes, “abre un espacio en el que todo el mundo podemos estar elucubrando, y eso resulta insoportable políticamente para un presidente del Gobierno, y más en época electoral”.
“La carta puede haber llegado a la ciudadanía harta de la conversación política basura”
A su juicio, la judicialización inclina mucho la atención pública, y ese es el factor de “una reacción política y personal” de Sánchez, que “por lo pronto ya ha surtido efecto”. La “impresión como ciudadano” de Pasquau es que Pedro Sánchez este lunes va a pedir un “refuerzo”, suscitando una cuestión de confianza, en busca de un “espaldarazo explícito” de cara a “afrontar con más fortaleza los procesos electorales que vienen”.
Para este profesor, el movimiento de Sánchez mediante una carta pensaba no tanto en militantes y convencidos, sino “en una franja de la ciudadanía que entiende el hartazgo de la conversación política" existente. Gente, por ejemplo, a la que “no le entusiasma la necesidad de estar negociando tantas cosas, o que no está de acuerdo con la amnistía, pero harta del bombardeo continuo de una conversación política basura. Sánchez, con esta carta, ha “podido conseguir su complicidad”.
