La industria agroalimentaria desempeña un papel vital en la economía de Navarra, generando empleo, riqueza y contribuyendo al desarrollo regional y la cohesión territorial. El sector industrial agroalimentario representa algo más del 14% del PIB Industrial de Navarra, dando empleo en torno de 15.000 personas.

La industria agroalimentaria es una seña de identidad de la Comunidad Foral de Navarra, formada por un tejido empresarial muy diverso, con una agrupación de empresas de muy diverso tamaño y con una amplia variedad de productos, siendo reconocida nacional e internacionalmente por la calidad de los mismos.

La situación de las industrias agroalimentarias sigue estando muy afectada por el condicionante geopolítico mundial. Las subidas de costes generadas desde finales del año 2021, aun estando contenidas, siguen siendo superiores a las posibles subidas de precios que se han repercutido a los clientes. El final de la guerra de Ucrania, tristemente, se está alargando y sus consecuencias siguen afectando y desestabilizando la economía europea y generando mucha incertidumbre en nuestro sector.

A esa situación, hay que sumarle la alta carga normativa a la que se ha visto afectado el sector agroalimentario. Durante los últimos años se han aprobado una serie de leyes que están afectando directamente a la competitividad de las empresas, generando una compleja y tediosa carga administrativa, dificultando el día a día del tejido empresarial, más aún teniendo en cuenta que mayoritariamente está formado por empresas de pequeño tamaño. La reforma laboral, la aplicación de la Ley de la Cadena Alimentaria, la aprobación de la Ley de Envases y Residuos de Envases, o la Ley de Residuos y Suelos Contaminados, con la aplicación del nuevo impuesto especial sobre los envases de plástico no reutilizables, están generando un aumento de la carga impositiva y unas trabas administrativas que hacen más complejo el trabajo de las empresas. Es necesario buscar un equilibrio entre la protección del medio ambiente y la sostenibilidad del sector, sin ahogar a las empresas con excesivas cargas normativas.

Los cambios en los hábitos de consumo, las consecuencias del cambio climático y la captación y retención de talento son retos a los que las industrias agroalimentarias se enfrentan. Las nuevas tendencias del mercado, la aparición de nuevos productos, la mejora de los valores nutricionales de los alimentos o los nuevos mercados son oportunidades y retos a los que la industria debe hacer frente. Para ello, la innovación y la colaboración son esenciales. Estas características siempre han formado parte del ADN de las industrias agroalimentarias, ya que las empresas agroalimentarias de Navarra han estado innovando desde hace mucho tiempo, lo que les ha permitido ser un referente en su sector y estar posicionadas en un lugar privilegiado.

El cambio climático, reflejado en los bruscos cambios de temperatura, unido a los largos periodos de sequía o los incendios que se han visto en Navarra en los últimos tiempos, supone un reto mayúsculo para el sector agroalimentario, desde el punto de vista tanto de agricultores y ganaderos como de empresas. Es por ello, que llevamos tiempo solicitando a las Administraciones que trabajen a corto y largo plazo para poner medidas que ayuden a mitigar las consecuencias. La finalización del Canal de Navarra, unido a un estudio de futuras necesidades debe ser prioritario y estratégico.

La falta de mano de obra es otro reto vital para la competitividad del sector. La complejidad para incorporar trabajadores en el sector primario, unido a la falta de perfiles para cubrir las necesidades de la industria agroalimentaria, pueden llegar a poner en peligro la estabilidad y crecimiento del sector. La falta de mano de obra está llevando a los agricultores a plantearse el cultivo de productos que requieren de poco personal, pudiendo llegar a darse el caso de que haya problemas para garantizar el volumen de hortalizas que son referentes en Navarra. Debemos definir una estrategia conjunta con el Gobierno Foral para conseguir ofrecer a los agentes productivos del sector agroalimentario los medios humanos necesarios para garantizar la continuidad y el relevo generacional dentro del sector.

Por todo ello, es crucial que los actores involucrados en la cadena, tanto empresas o asociaciones sectoriales, Gobierno y sociedad en su conjunto, trabajamos juntos parasuperar estos desafíos y promover un desarrollo sostenible y competitivo de la industria agroalimentaria en Navarra. Sólo a través de un enfoque integral y colaborativo será posible asegurar un futuro próspero para este importante sector en la región. Si trabajamos de forma conjunta conseguiremos que el sector agroalimentario siga siendo prioritario en Navarra, posicionándolo como el principal sector económico de la Comunidad Foral.